En nuestra selección de ahumados y encurtidos encontrarás piezas limpias, de corte homogéneo y sabor equilibrado.
Trabajamos ahumados de calidad (salazón preciso y humo controlado) y encurtidos en vinagre de vino blanco y sal con el punto justo de acidez para acompañar tapas, ensaladas y tablas.
Compra ahumados y encurtidos online con envío frío 24 - 48 h a toda España desde el Mercat del Ninot (Barcelona).
5 productos
Casquería de bacalao: sabor y gelatina para guisos
Los callos, la tripa, las pieles y la cabeza de bacalao aportan una cantidad de gelatina natural que da textura a caldos, salsas y potajes. Son piezas muy utilizadas en recetas tradicionales de Portugal, País Vasco, Galicia y Andalucía.
Diferencia entre callos, tripa y pieles de bacalao
Callos de bacalao: partes internas con textura firme y ligeramente cartilaginosa, ideales para guisos con salsa.
Tripa de bacalao: láminas más finas y gelatinosas, perfectas para platos de cuchara suaves y melosos.
Pieles de bacalao: muy ricas en colágeno, se usan para caldos, arroces o para hacer chips crujientes si se deshidratan y se fríen.
Cabeza de bacalao seco: el mejor fondo para caldos y sopas
La cabeza de bacalao se utiliza sobre todo para hacer caldos base: cocida a fuego lento, suelta gelatina y sabor que luego puedes usar en arroces, fideuás, sopas marineras o guisos de patata. Es una pieza económica que marca la diferencia en platos de cuchara.
Foie de bacalao ahumado: delicatessen del mar
El foie de bacalao (hígado ahumado) es un producto muy apreciado en el norte de Europa. Tiene textura untuosa y sabor intenso, perfecto para untar en pan tostado, combinar con encurtidos suaves o usar en pequeños canapés. Es la parte más gourmet de esta colección.
Ideas de recetas con callos y tripa de bacalao
Callos de bacalao con garbanzos o con salsa vizcaína.
Tripa de bacalao en salsa verde con ajo y perejil.
Pieles de bacalao en caldo para arroces marineros melosos.
Cabeza de bacalao para una sopa de pescado casera.
Foie de bacalao en tosta con cebolla confitada o pimientos del piquillo.
Consejos de hidratación y cocción
En los productos secos (callos, pieles, cabeza) conviene seguir siempre las instrucciones del fabricante: remojo previo, tiempos de cocción y nivel de sal. Las piezas ya remojadas, como la tripa al punto, pueden ir casi directamente al guiso, ajustando solo el tiempo final para que queden tiernas y gelatinosas.